Aunque no sea la época más idónea para fotografiar en bebederos, el calor y
la falta de lluvias que hemos sufrido este atípico otoño, ha hecho que dicho
lugar sea uno de los más visitados, incluso más que los comederos. No sé si será
cosa del famoso cambio climático o del Niño, que por cierto podría ya dejar de
joder, o que será, pero lo cierto y verdad es que ha transcurrido el otoño prácticamente
sin caer una sola gota de agua. Es curioso ver especies típicas del frio
invierno en mangas cortas y con calor, pero eso es lo que hemos tenido este
otoño, parras brotando, almendros en flor y prácticamente una otoñá nula, incluso
el día 26 de este mes de diciembre, una culebra de herradura tomaba el sol en
las piedras de mi bebedero, vamos "pa cagarse", y perdón por
vulgaridad pero es que no encuentro otra expresión mejor en este momento.
Pero bueno, la naturaleza sigue su curso y como he dicho antes las especies
típicas invernales no nos han dejado de visitar, y como estrella principal,
como otros años, el colirrojo tizón ha sido el que más se ha paseado por la
alfombra de piedra del bebedero. Lástima que no se ha dejado ver ningún machito
con su traje tiznado.
Feliz año a todos y que sigamos viéndonos en el campo.
Curioso ejemplar con unas cejas muy pronunciadas |
Ecija, 30 de diciembre
de 2015
Pablo Reina
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