Como muchas otras veces empezamos este nuevo año con nuestros mejores
deseos a todo el mundo, con nuevos retos y promesas, nuevos planes, nuevas
metas y nuevos propósitos, mirando al año que nos llega con optimismo y buenos
deseos. Dejare de fumar, hare mas deporte, pintare todos los días...Algunos de
estos propósitos los conseguimos, otros no, pues no dejamos de vivir en el
futuro, no nos damos cuenta que lo realmente importante es el presente, es esa
persona que tenemos al lado y se nos pasa la vida prometiéndole cosas que seguramente
no podamos cumplir y que vamos postergando año tras año.
No nos paramos a mirar a nuestro alrededor y aprender del medio natural que
nos rodea. La naturaleza no cree en el futuro, es una tremenda luchadora y
emprendedora que vive continuamente el presente, pues cada brote o ser que nace
pueden ser depredados por otro en cualquier momento, pero no por ello se rinde
y rápidamente vuelve a crear otro ser.
Nos estamos desanimalizando. No podemos vivir sin wapssa, sin Facebook, sin twitter. Leemos libros electrónicos, compramos desde
nuestras casas, vemos documentales naturales sentados cómodamente en nuestro
sillón sin percatarnos que con solo salir al campo podemos disfrutar de la
autentica naturaleza. Si aprendemos a comportarnos y a valorar el medio natural
podemos sorprendernos con el mejor documental del mundo: la vida en directo.
Podemos sentirnos como el ojo del Gran Hermano. Pero no, salimos a pasear en
coche, vemos una avutarda y rápidamente corremos en busca de otra especie que
apuntar en nuestro cuaderno de campo, luego ojeamos el cuaderno y vemos que
tenemos apuntada 56 especies diferentes de aves vista en una jornada, pero no
hemos apuntado nada sobre su comportamiento, no sabemos nada sobre ellos, solo lo
que nos dice la guía.
Ese va ha ser mi propósito este año, pararme a mirar mas y no crearme metas
imposibles de cumplir. Que tengáis un hermoso año.
El viento de levante arreciaba. Las gotas de agua levantada por el
somormujo volaban a gran velocidad. Sus largas plumas de la cabeza flotaban al
viento, no parecía que nadara, mas bien se balanceaba en sobre las olas. De vez
en cuando se sumergía y salía a la superficie con un buen montón de plantas en
el pico, luego las soltaba y volvía a sumergirse para volver a salir con más
plantas. Se acerca la primavera y pronto necesitara formar un buen nido.
Écija, 1 de enero de 2013
Pablo
Reina
Hermosas palabras querido Pablo, cuánto amor y conocimiento muestras en cada relato con dosis de pura filosofía! Estoy totalmente de acuerdo contigo en que nos estamos desanimalizando mucho. Por eso este año unos de mis propósitos será animalizarme más y perderme paseando por la campiña...
ResponderEliminarUn abrazo y Feliz año!
Gracias José Luis, espero este año coincidir en mas de una salida contigo y animalizarnos juntos. Un abrazo.
EliminarWonderful images.
ResponderEliminarGracias David. Saludos desde Ecija.
EliminarPrecioso amigo. Feliz 2014 para ti y los tuyos. Un abrazo
ResponderEliminarIgualmente Jero, espero tu colirrojo, no lo olvido.Un abrazo desde Ecija.
EliminarMuy buenas capturas, Pablo!
ResponderEliminarSiempre escapa mi objetivo, este somormujo!
Te deseo un año llena con excelentes ocasiones de fotografía, :)
Un fuerte abrazo!
Serán los únicos que se te escapan, pues menudas capturas haces!!. Gracias y un saludo de este ecijano.
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