martes, 2 de octubre de 2012

La berrea


La berrea, los montes se llenan de quejumbrosos lamentos, por doquier brama el ciervo buscando camorra. Sobrecoge. A mi me emociona. Y la tarde se prestaba a ello. Cielos encapotados anunciando una tromba de agua, dando una tonalidad preciosa al monte. Aun temiendo el aguacero, nos fuimos a disfrutar de este maravilloso espectáculo  Miguel, mi hijo Jaime y yo. En Cantillana habíamos quedado con Raúl Rodríguez, Juanjo Domínguez y su hijo Dani, que nos servirían de guías en este día. Raúl y Juanjo son dos excelentes fotógrafos  que los une una misma pasión, la naturaleza.
    Cuando llegamos a la finca eran la una y media, comimos algo e iniciamos la marcha. La finca aunque privada, la cruza una vía pecuaria que une Cantillana con El Pedroso y si no te sales del camino no tendrás ningún problema con los guardas que te vigilan constantemente.
     El primer tramo es durillo, sobre unos tres kilómetros de ascensión sin ninguna zona de descanso. En este tramo no pudimos ver ningún animal, pero si se les escuchaba berrear por todos lados.
    Al fin llegamos a una zona llana de campos ralos con encinas y alcornoques, y como si de un anfitrión se tratara apareció el precioso venado que tengo aquí fotografiado. El animal llego despacio nos observo un rato y se tumbo. Nosotros comenzamos a disparar nuestras cámaras y nos sentamos también. Al ver que el animal no se movía nos fuimos acercando un poco y tomamos posiciones. Los ciervos berreaban por nuestro alrededor y al poco tiempo entraron dos ciervos mas, pero no del porte del que, sin inmutarse, teníamos delante. También hizo presencia un jabalí, que mantuvo las distancias. En el cielo, los buitres leonados y un solitario buitre negro volaban encima de nosotros. También lo hicieron una culebrera y tres abejeros. Un  agateador no paraba de saltar por los troncos de las encinas que teníamos enfrente.
   Después de hora y media con el bicho a menos de cuarenta metros nuestros, después de tomarnos el bocadillo tranquilamente sin que el animal se coscara, decidimos acercarnos un poco mas, ahora si se levanto y se alejo despacio.
    Ya eran las siete de la tarde y  pudimos ver algunos ciervos más y algún que otro jabalí. Cansados nos fuimos despacio, esta vez cuesta abajo, menos mal, con un atardecer precioso lleno de nubarrones.
Jaime con Raúl iniciando la caminata

Pantano de los Melonares

Jaime, Miguel y Raúl

La llegada del pavo

No dejaba de observarnos

Otro venado bastante mas joven



Este jabalí no quiso acercarse mas

El ciervo en todo su esplendor



Miguel, Juanjo y su hijo Dani

Majestuoso se retiro despacio.


Otro jabalí

Miguel 

Precioso constraste de azul y verde


El cielo parecía arder
Espero que volvamos otra vez, desde luego merece la pena la caminata, y por supuesto la compañía de Raúl y Juanjo, y que decir de su hijo Dani, que pese a su corta edad, solo siete añitos, se porto como un machote aguantando la marcha.

                                                                                              Écija, 1 de octubre de 2012


                                                                                                   Pablo Reina.

8 comentarios:

  1. Uff Pablo lo que hubiese dado por acompañaros. La berrea es una de mis asignaturas pendientes. El próximo año me propondré en serio hacerle unas sesiones. Unas fotos preciosas y ese venado con ese porte majestuoso es una maravilla. Saludos desde mi Terruño.

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    1. Gracias Jerónimo, es un autentico espectáculo, lastima que el monte este aun tan seco. Un saludo.

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  2. Hola Pablo, bonito reportaje sobre la berrea y la amistad, menudos adornos portaba el venado, muy buenas fotos.
    Saludos, Lolo

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    1. Si el pavo tenia una buena cornamenta. Algunas veces te apetece la soledad, pero momentos como este son mejores si los comparte con buena gente.Saludos Lolo.

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  3. menudo ejemplar que pillasteis por aqui la berrea esta muy floja como el año pasado un saludo

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    1. Todo esta demasiado seco, los animales no se han recuperado como debían de este desastroso año, esperemos que el año que viene sea mejorcito. Un saludo Ferreiro.

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  4. Que buen dia pasamos Pablo, y eso que por la mañana debido a la lluvia dudabamos de como saldría. Pero al final, todo fué bien, y en buena compañia.
    Buen relato y preciosas fotos del bello animal que nos dejó hacerle casi todo lo que quisimos, solo faltó que los niños se montaran encima, jajaja.
    El paisaje, tambien precioso, sobre todo los colores del atardecer, los de la ultima foto, de un cielo que "ardia".
    Eso si, como comentaba Juanjo por el whatsapp al enviar una foto del ciervo, las tenemos repetidas, jajaja.
    Bueno a ver si pronto repetimos.
    Saludos.

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  5. Repetidas por cuatro Miguel, pero bueno como de estas no tenemos que vender esclusiva... Desde luego haber cuando repetimos. Saludos.

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