Mochuelo común o Europeo-Little Owl (Athene noctua)

Esta entrada se la dedico a esta pequeña rapaz nocturna a la cual he tenido la suerte de seguir durante un mes. En uno de mis paseos por el campo pude comprobar que un mochuelo estaba a la entrada de una vieja madriguera de conejo, a los pocos días volví, y pude ver como un solo pollo de mochuelo se encontraba en las inmediaciones del agujero y uno de sus progenitores estaba parado en lo alto de la alambrada que evita que las reses bravas invadan la carretera. El adulto no paró en todo el rato que estuve allí de cazar para llevarle comida al volantón; no pude ver a mas crías ni al otro adulto. Pasados unos quince días volví y el pollo voló del suelo a una retama cercana a la madriguera. Ya volaba algo pero aun no lo hacia con suficiente destreza y su curiosidad me dejo fotografiarlo a placer. Todas las fotos están echas desde el coche pues al encontrarse el nido cerca del camino los pájaros no mostraban el menor signo de asombro a este.

El mochuelo, como la mayoría de las aves rapaces nocturnas y diurnas, todavía se le considera alimaña y es abatido a tiros o cazado de cualquier forma, incluso he conocido a una persona que se los comía, cosa que no entiendo. Pero bueno de todo hay en la viña del Señor. Como es sabido el mochuelo no es una alimaña, al contrario, es un perfecto cazador que da cuenta de muchos roedores y su dieta se basa en insectos, muchos de ellos perjudiciales para los cultivos.

A mi es un ave que me encantan y en las tardes de primavera cuando paseas por los olivos los cantos de los mochuelos te acompañan haciéndote el paseo mas agradable.

Uno de los progenitores, posiblemente el macho, a la entrada
de la madriguera.

El único pollo que pude ver se encontraba a la entrada de la
madriguera y el adulto voló varias veces a alimentarla

El adulto oteando el campo en busca de cualquier presa que se
pusiera a su alcance

                                      

El pollo ya volantón posado en una retama, no paro de mirarme
en todo momento

                                                                                           Ecija 31 de julio de 2012

                                                                                                 Pablo Reina